Camino de la Vera Cruz - Día 6 11-5-13 Teruel-Ademuz
La jornada de hoy ha seguido en su mayor parte el curso del
río Turia. Bonito el tramo de Villaespesa. Viejos y carcomidos ejemplares
sombrean el cauce.
Nos alejamos de la vega ascendiendo entre campos de cereal y
rojos barbechos, lo que nos permitirá regresar a ella descendiendo por un
barranco enmarcado por paredes calizas, que se abre poco a poco. Al principio, tímidos
bancales de almendros ciñen las rojas calizas, que dan paso a pequeñas y
cuidadas huertas. La vega se adivina a bajo. Un tupido bosque acompaña al
Turia. De pronto; entre el follaje, al otro lado del río, el castillo de Villel
se eleva inexpugnable sobre un cerro. Perteneció, como Alfambra y Libros a la
Orden de Monte Gaudio y al Temple.
Nos encaminamos al santuario de la Fuensanta, de virgen y
fuente sanadora. Nos introducimos por el desfiladero comenzando una fuerte
subida que nos llevara al punto más alto de la jornada. Mientras, una docena de
buitres giran parsimoniosos sobre mi cabeza ¿Qué querrán?
Descenso vertiginoso y comprometido hasta Tramacastiel, con maciza
iglesia de defensiva torre. Nos encaminamos a Libros. En el altozano un poste
de dirección del Camino indica un sendero a nuestra izquierda. Decidimos
seguirlo. El sendero se vuelve cada vez más técnico y terminamos cargando la
bicicleta al hombro. Para despeñarnos directamente sobre Libros.
Gruesos goterones empapan la tierra. Duele el respirar el
tomillo. No queremos mojarnos. Nos refugiamos en el bar del pueblo, uno, dos,
hasta cinco quintos han caído mientras dábamos cuenta de un plato de chorizo, y
otro de salchicha, con otro de jamos y uno de queso. Para terminar con unas
salchichas de orza. Café y unos chupitos nos han preparado para lo que nos
quedaba de camino.
Otra vez seguimos la vega fresca del Turia. Torre Alta y
Torre Baja se suceden antes de Ademuz. Su caserío se desparrama, monte abajo,
hasta el Turia. Poco más de cincuenta kilómetros en esta llevadera jornada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario